Alcaudete ciudad de manantiales
Alcaudete denominada por los musulmanes al-Qabdap y posteriomente por los cristianos algaidak, significa "Ciudad de manatiales".
La cultura del agua es un elemento fundamental en la idiosincracia alcaudetense, pues forma parte de las vivencias más profundas antiguas que han conformado su espíritu. Es verdad que en los tiempos modernos ha disminuido su importancia al haberse tecnificado la agricultura y la vida doméstica.
So numerosas las fuentes y acuíferos que, en el terriotorio municipal de Alcaudete, han desaparecido y otras, que de no poner algún remedio, en un tiempo no muy lejano podrían desaparecer.
Cuenta el cronista oficial de la localidad D. Antonio Rivas Morales en su libro "Historia de Alcaudete", que hasta el siglo XX el abastecimiento de agua a la población se efetuaba por medio de las numerosas fuentes públicas existentes en aquella época.
El servicio de agua potable se contemplaba con los lavaderos públicos y con los abrevaderos para los animales. Su existencia y buen estado eran esenciales para la población.
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